Leer, el remedio del alma

Leer, el remedio del alma
Imagen creada por Ilea Serafín

18 de abril de 2017

Doctoranda al borde de un ataque de nervios XIII


Parirás con dolor

Dios, como castigo por comer la fruta del árbol prohibido, dijo a Eva: parirás con dolor. Mi osadía y mi arrogancia por decidir hacer una tesis fueron castigadas con unos últimos días finales llenos de obstáculos.

Como si de un parto se tratara os contaré cómo fueron estos últimos días hasta que di a luz mi querida tesis. A partir de aquí utilizaré expresiones típicas de un embarazo y su correspondiente alumbramiento pero, por si alguno se pierde, pondré entre corchetes lo que realmente significa el símil.

Hace años que deseo ser madre [tener un doctorado] y aunque mi edad ya está fuera del rango deseable para que el embarazo y el parto sean seguros, los médicos [directores] decidieron que con un especial seguimiento quizás pudiera ver realizado mi sueño.

Así que me quedé embarazada y poco a poco sentí cómo una vida se gestaba dentro de mí [pensamientos recurrentes sobre experimentos, pruebas en laboratorio y análisis estadísticos]. A lo largo de muchos meses, la criatura [tesis] fue creciendo, a veces parecía que no se desarrollaba bien [no salían resultados concluyentes] y hasta hubo momentos en que creí que había abortado espontáneamente ante la ausencia de signos vitales [ninguna ‘p’ significativa y un artículo rechazado por varias editoriales], pero gracias al cuidado de mis excelentes ginecólogos [directores], la criatura se desarrolló, creció y llegó a la fase final de la gestación [escritura].

Dada la fecha de concepción [registro del programa de doctorado en la secretaría] calculé que saldría de cuentas a finales de abril. Sin embargo, por prescripción facultativa [ordenanzas del decanato] se decidió que el parto habría de ser a lo más tardar el día 20 de abril.

Como la niña venía de nalgas [dos artículos que debían publicarse aún no se habían entregado a las revistas correspondientes] mis ginecólogos decidieron esperar hasta el último día de plazo y que la niña naciera por cesárea [entregar los ejemplares impresos en el decanato en el último momento].

Antes de que llegara la tan ansiada fecha me comporté como una madre primeriza responsable y acudí a clases de preparación al parto [indagué cómo hacer el pdf que integra los artículos publicados en las revistas y el texto escrito, y cómo encuadernar los ejemplares], además mi cónyuge me acompañó solícito y también participó en esas clases. 

El lugar del alumbramiento [Facultad de Farmacia] ya estaba decidido desde el inicio de la gestación, pero los facultativos que vigilaron el desarrollo de todo el embarazo pertenecían a dos hospitales distintos [CSIC y UCM], por lo que en algunos momentos hubo alguna controversia sobre el tratamiento a seguir pero todo se desarrolló felizmente.

Cuando faltaban menos de dos semanas para salir de cuentas uno de los ginecólogos me avisó de que la fecha del parto se iba a anticipar, en lugar del jueves día 20, sería el martes día 18. Este inesperado adelanto me pilló por sorpresa y aunque ya tenía preparada la canastilla [la tesis escrita] me faltaba aún comprar la cuna [hacer el pdf final y llevarlo a la imprenta]. No obstante, me puse a buscar como loca un modelo que me gustara y que fuera útil a mis necesidades [maquetar bien el pdf y comprobar que no hubiera erratas]. El domingo 16, no sé si por los nervios o porque la criatura ya tenía ganas de salir, estuve todo el día con contracciones [ataque de nervios en toda regla porque el pdf no salía bien], y algunas fueron realmente intensas [al quinto intento encontré un texto en los encabezamientos que no se veía en la versión Word] por lo que pasé un día bastante fastidiado. Me metí en la cama con mucha ansiedad.

Al día siguiente, lunes 17, me dispuse a ir a la tienda para comprar la cuna [fui a la imprenta a encuadernar los ejemplares]. Después debía hacer unos trámites administrativos para poder ingresar al día siguiente en el hospital y dar a luz [entregar en el decanato un montón de formularios y la tesis impresa], pero uno de mis ginecólogos que debían firmarme el informe de ingreso se puso enfermo y ese día no pasaba consulta [no acudió a su puesto de trabajo], pero como es un excelente profesional me ofreció la posibilidad de acudir a su domicilio para recogerlo allí.

No sé si por el contratiempo inesperado o porque la hora ya se estaba acercando empecé a sentirme mal y con muchas contracciones [nerviosismo en estado puro y varias vueltas a la manzana del domicilio de mi director número DOS para dar con el portal de la vivienda]. 

Al final el día del nacimiento llegó. La mañana no pudo empezar peor. Tenía pensado estar todo el día acompañada por una colega que había dado a luz hacía poco [entregó su tesis en noviembre] y así me podría aconsejar con su propia experiencia, pero cuando me disponía a salir de casa me envía un mensaje al móvil para comunicarme que su abuela se encuentra mal y que está en urgencias con ella. Mi cónyuge se ofreció a acompañarme pero resulta que estaba con un ataque de gota que no le permitía caminar. Conmigo la ley de Murphy no se cumple, se ensaña.

Viendo que la cosa no empezaba bien decidí relajarme escuchando música. En casos de estrés puede resultar de mucha ayuda, aunque yo no me puse a oír melodías cadenciosas. Esas moñadas no me parecen útiles. Me planté los auriculares y me fui a afrontar mi destino oyendo a Bruce Springsteen con los acordes de “No surrender” (No rendirse). 

La tan ansiada criatura estaba ya en el canal de parto [ejemplares impresos y encuadernados y formularios cumplimentados] pero aún necesitaba dos informes de dos galenos de otras especialidades [evaluadores externos] que aunque estaban en el mismo complejo sanitario [Universidad] trabajaban en ramas distintas de la sanidad y tenían su consulta en diferentes pabellones [Facultades].  La hora tope para entrar en quirófano era las 12 h. Al menos uno de los galenos pasaba consulta cerca [en la misma planta del departamento] pero el otro estaba en un pabellón algo alejado de la clínica donde yo daría a luz y mientras las contracciones cada vez eran más seguidas y dolorosas tuve que desplazarme a pie hasta su consulta.

Tengo que aclarar que el complejo sanitario donde yo iba a alumbrar [Universidad Complutense] es el más grande de España (algunas capitales de provincia son más pequeñas que el campus, para más desgracia yo no estudié allí y no conozco dónde se ubican otras facultades). Con el tic-tac de las 12 h. en la mente y con contracciones casi continuas me desplacé hasta dicha consulta, y aunque seguí las indicaciones que previamente me habían dado mis compañeros, el pabellón buscado no se encontraba donde me habían dicho; fue cuando pensé que o lo habían abducido los extraterrestres, o me había perdido, esta última conjetura era la más plausible (y la verdadera) dado mi estado de nerviosismo y mi desastrosa capacidad para orientarme. Después de varias vueltas, y al borde del colapso, logré encontrar al facultativo que me dio el informe y pude regresar a mi unidad de ginecología. 

Cuando por fin pude entrar en el quirófano para la tan ansiada cesárea le entregué “in extremis” a la cirujana encargada de realizarla [la vicedecana de Doctorado] todos los requerimientos necesarios para poder dar a luz. La cirujana me recibió con la amabilidad acostumbrada en otras consultas y además con cara de extrañeza ante mi faz sofocada (estaba literalmente asfixiada de tanto correr), por lo que solícita me preguntó a qué se debía mi semblante angustiado. Cuando le dije que la hora límite estaba a punto de expirar, su gesto de extrañeza se agudizó y fue cuando me dijo que todavía me quedaban dos días, que hasta el día 20 tenía tiempo de sobra…

No voy a reproducir lo que se me pasó por la mente porque sería de muy mal gusto. Además ese error de fechas casi consiguió que el parto se malograra porque de tanto correr a punto estuve de parir en la calle [pensé en entregar los ejemplares a unos jardineros que andaban por allí y abandonar].

El caso es que mi niña ya está aquí, aún está toda arrugadita por los esfuerzos del parto [la versión impresa para la administración es muy sobria y sin ningún adorno] pero con los días se pondrá más guapa y para cuando llegue el día del bautizo [la defensa ante el tribunal] lucirá sus mejores galas [una encuadernación más trabajada y con una portada más vistosa]. Entonces, si los sacerdotes que ofician la ceremonia [los miembros del tribunal] dan su aquiescencia [me aprueban la tesis] mi niña ingresará en la comunidad cristiana [formará parte de la base de Tesis Doctorales del Ministerio de Educación] y yo seré completamente feliz [Doctora en Farmacia].

De momento, mientras que llega el bautizo y para que os hagáis una idea, os mando una imagen de mi recién nacida. Aunque ahora mismo no luzca especialmente guapa para mí es la niña más bonita del mundo y yo soy una madre orgullosa de su retoño.




30 comentarios:

  1. Qué bueno, Kirke, me ha encantado todo: el símil con un parto, que le quisieras entregar los ejemplares a los jardineros, tú próximo título y hasta tus uñas verdes. Igual que mi hija, que ya también acabó de redactarla, pero en el caso de ella ha de ir detrás de sus correctores para que se la revisen. En fin, he leído con muchas ganas tu relato porque está divertido. ¡Felicidades, casi-doctora!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Reconozco que mis directores echaron el resto en el tramo final, la fecha límite estaba muy próxima y además venía un periodo vacacional que rompía el ritmo. A pesar de todo, ellos cumplieron con su labor corrigiendo rápido y dándome directrices muy concretas. Incluso el que se puso enfermo me recibió en su casa para darme un informe pendiente. No puedo quejarme, la verdad.
      Suelo pintarme las uñas con colores poco tradicionales, ayer tocaba verde ;)
      Mucha suerte para tu hija, y dile que todo llega.
      Un beso grande, Ángeles.

      Eliminar
  2. Aún no termino de reírme por tus ocurrencias geniales, Paloma jajajjaja (aunque también me pongo en tu lugar y me imagino que tú ganas de reirte no tendrías ningunas). Bueno, lo importante es que el parto ha llegado a buen término y que tanto la mamá como la nena están muy bien de salud y ya en casita.
    Realmente creo que el símil del parto es muy adecuado, ¡qué barbaridad! Y sin epidural ni nada, a pelo...

    Enhorabuena por tu flamante título de doctora, que bien merecido lo tienes :))

    ¡Un beso grande y mil gracias por tu sentido del humor, Paloma!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tú lo has dicho, el parto a pelo, porque la otra hija que tengo, la de carne y hueso, la parí pero con anestesia epidural y quieras que no, se agradece, jajaja.
      Bueno, aún queda el bautizo y pasar por el trance de que cinco eminencias te evalúen la exposición, pero ya me agobiaré cuando toque y todavía faltan cuatro o cinco semanas.
      Muchas gracias por tus palabras, Julia.
      Besos.

      Eliminar
  3. Sentirse martirizador, director, perturbador, obstetra, ginecólogo, matrona y pediatra al mismo tiempo es sentirse inventor de un coctail (a partir de ahora coctel) realmente explosivo. Un coctel que primero te anima, después te pone y por último te machaca. Kirke en algún momento me has llamado camaleónico, que al final es como ser perejilillo de todas las salsas y no ser casi nada, lo cual es complejo siendo el candelabro de los 7 brazos (trabajos o especializaciones)citadas al principio. He sufrido contigo pero has sabido guardar en silencio oral tu sufrimiento aunque has atacado, valga la expresión muy actual, con la madre de todas las bombas, la causticidad de tus escritos bañados con el sarcasmo de un parto que se ha producido después de unos años de gestación.
    Como martirizador, director y perturbador el periodo se me ha hecho corto, aunque he aprovechado hasta el último momento esperando obtener una sonrisa de mis bromas, sin conseguir otra cosa que incrementar tu pánico. Es como si la prueba de la rana siguiera de actualidad. Al final el impreso 503 iba después del 502 y antes de 504, sin olvidar lo que subscribe el 407 y el muy manoseado 398. Y para colmo mi firma queda para los restos en virtual.
    Como obstetra, ginecólogo (o viceversa) y matrona (el orden de factores hacen poco al caso) orgulloso de que haya sido un parto no complicado. Las nalgas se han solucionado en parto eutócico de presentación cefálica, que con la ayuda de un poco de anestesia final y presencia conyugal ha resultado en niño de 3 kg un poco llorón y atacante de pezón desde el primer momento, lo que se dice un recién nacido orgullo de propios y extraños.
    Como pediatra, me queda aún un poco de labor; decirte que sigas dándole el pecho que en pocos días verás la diferencia y que el/la niño/a llegará al bautizo coloradito, rellenito, bien lactado, con los incisivos inferiores a punto de aflorar y casi preparado para las leche de fórmula, a la que te recomiendo vayas añadiendo sin prisas cereales, primero sin gluten y luego despacito, despacito, introducir otros alimentos, evitando el desánimo, el cansancio y las alergias. Eso sí tienes que pasar por algunas pruebas que aun te producirán zozobra y que te harán casi odiar los colores y los sabores del Power Point. Pero recuerda Kirke no hay prisa, en pocos meses llegará el día que el infante coma de todo y sea un niño precioso y yo me sienta buen pediatra y mejor director, aunque claro una madre será siempre una madre.
    Besos y enhorabuena.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Teniendo en cuenta las condiciones de la futura madre, la gestación y el parto podían haberse complicado mucho, pero conté con un buen equipo médico que me vigiló muy bien y que supo cómo reaccionar ante cualquier anomalía que se presentaba.
      Gracias por ser un estupendo facultativo y por ser tan paciente con los cambios de humor típicos de las embarazadas, que tan pronto estamos eufóricas como nos sumimos en la más negra depresión y que, en mi caso, me impidieron captar tus bromas en algunos momentos, creyendo que era verdad cuando me estabas vacilando.
      Gracias, por saber prescribir tan bien y saber cómo actuar cuando las cosas andaban torcidas; gracias por ser tan buen profesional y tan buena persona.
      Tu buen hacer es el responsable de que el parto llegara a término y con una nena sana y robusta (¡¡¡ 333 páginas !!! y eso que va por publicaciones).
      Espero, de todas formas, seguir yendo a tu consulta para que me sigas aconsejando y vigilando.
      Besos, jefe.

      Eliminar
  4. Muy buena Paloma esa comparativo del embarazo y alumbramiento de la tesis.
    Has conseguido ponerme de los nervios mientras te imaginaba corriendo por la complutense ( que la imagino impresionantemente grande) , sudando, angustiada, preguntando por esos facultativos y la traca final, ese dia 20, para morirse y asesinar a alguien, qué nervios chiquilla, esto es un sin vivir. Pero ya casi estás ahí, bravo por ti.
    Un beso enorme

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que mi periplo por la ciudad universitaria fue algo agonías, además ayer hizo un calor impresionante con lo que sudé la gota gorda en todos los sentidos.
      Además de perderme, y de los puros nervios, me hice un lío y hubo un momento en que no solo que no sabía dónde estaba, es que no sabía dónde tenía que ir. La profesora que me tenía que dar el informe estaba en la facultad de Ciencias del INEF y yo me fui a la UNED, un cambio de siglas fruto del estado de nerviosismo que a punto estuvo de acabar en infarto.
      Pero ya pasó.
      Gracias por comentar, Conxita.

      Eliminar
  5. Bueno veo que como siempre y aún con nervios muy lógicos por otra parte dada la importancia de la tesis, muy importante, tú sentido del humor no se perdido, y eso es muy importante.
    Te imaginado lo mal que lo tuviste que pasar, y si creo que jorge me ha dicho, que es donde esta haciendo la carrera es grandisima la Complutense, de modo que es para ponerse mas nervioso si cabe para llevar la tesis, en fin tú has tenido finalmente un parto estupendo y todo a ido bien, ya casi eres doctorada y todos los nervios de estos días hacen que valga la pena luchar po lo que uno quiere en tu caso tu tesis doctoral, en fin Paloma has hecho un muy buen trabajo y me alegro muchisimo de que casi casi ya seas doctorada en Farmacia. un beso enorme y ánimo que ya queda solo el bautizo y en nada ya eres doctorada,y cuando todo acabe a pensar en un sitio de relax para olvidarte de estos meses de nervios.
    Psdta. El color de uñas me encanta, no había visto nunca las uñas pintadas de verde, es qu euna se fija en todo no solo en la niña si no también en el modelo jejee, es para fijarme en ideas, ya sabes así somos las mujeres jejeje.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El parto fue angustioso pero valió la pena. Toda la Ciudad Universitaria es enorme, de hecho hay varias líneas de autobús que la recorren, si además no tienes claro dónde tienes que ir las vueltas pueden ser interminables.
      Pero al final pude orientarme y llegar a mi destino (me orienté porque varios estudiantes que encontré por allí me ayudaron que si no...)
      P.D. Ya le comenté a Ángeles que me gusta pintarme las uñas pero de colores poco convencionales: verdes, moradas, naranjas o azules. Una manía que tengo.
      Un besote, Tere.

      Eliminar
  6. Qué genialidad de entrada. Cada referencia encaja a la perfección. Nació sanita, y eso es lo que importa. Felicidades.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Raúl. Por fin ya tengo a mi "nena" conmigo. Después de tantos meses ya tenía ganas de verla.
      Un saludo.

      Eliminar
  7. Caramba, Paloma, has logrado contagiarme la angustia y el estrés de todo el proceso. Y es que como soy muy nervioso y me han ocurrido cosas parecidas, me he puesto en tu piel viviendo, paso a paso, cada una de las peripecias. Ahora, por fin, ya podemos respirar tranquilos, jajaja
    Enhorabuena y un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Respirar, respirar, aún mucho no. Hoy tuve que entregar en Secretaría el visto bueno que ya me ha concedido el Decanato y resulta que me faltaba un pequeño trámite que me hizo oootra vez correr entre las facultades (dos de mis directores son del CSIC y están en otro edificio distinto a la facultad de Farmacia) para conseguir que me firmaran más impresos.
      Entre mis compañeros, y conocedores de esta publicación, hemos comentado que si ayer fue el parto, hoy tocaba expulsar la placenta, porque también tuve algún momento de agobio.
      En fin, cosas de la burocracia.
      Un abrazo.

      Eliminar
  8. ¡Enhorabuena por el feliz parto! todo llega a su fin y veo que con alivio y alegría.
    esa nena llamada "Tesis" ha salido adelante y luce ya, en tus manos orgullosas de madre.
    Espero que la puedas disfrutar y en el futuro próximo te de muchas alegrías.
    Una cosa me ha sorprendido enormemente, y es la gota que padece el padre, que como a Felipe II mortificaba en sus quehaceres cotidianos. ¿Es de los que consume carne roja con desaforo? Pues a ver si la dietista le pone coto a tal desmán.
    Espero poder asistir al bautizo de "Tesis"
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El padre, a pesar de sentirse republicano, padece enfermedad de reyes (ironías del destino). No es especial consumidor de carne roja pero su genética le predispone a esta dolencia ya que tiene antecedentes familiares (Felipe II padecía gota al igual que su padre Carlos I). De todas formas, en esta ocasión es probable que sea debido a que en los últimos cinco meses ha perdido bastante peso al ponerse a dieta y ejercicio, y cuando esto ocurre se suelen catabolizar proteínas que elevan el ácido úrico.
      Cuando sea el bautizo serás convenientemente avisado y podrás asistir a la ceremonia en vivo y en directo si así lo deseas pues el acceso a la defensa es libre. En cualquier caso, ya lo contaré también por aquí.
      Ya, de paso, hago extensible esta invitación a todo el que lo desee.
      Besos y muchas gracias.

      Eliminar
  9. Genialidad al poder, amiga. Desde la foto con la cunita y la "criatura" dentro, hasta el momento de desespero en que casi se va todo al traste con esa 'entrega' a los jardineros, ¡para morirse de risa!
    Estoy muy contenta, Paloma, pues como hay confianza me considero una tía más de la nena. Te felicito a ti y, por supuesto, al padre (-que, dicho sea de paso, espero mejore-) porque sé lo deseada que era. Y, aunque falte el bautizo, estoy segura de que será una fiesta "dialéctica" difícil de olvidar.
    ¡Mucha salud y besos para todos!.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como todos, o casi todos, los partos, tuve mis momentos de angustia, pero luego el resultado da por bien empleados todos los sacrificios.
      Desde hace tres días tengo una sonrisa bobalicona en la cara que no se me borra.
      Espero que esa fiesta dialéctica sea divertida para mí, porque es un arma de doble filo eso de enfrentarse a un tribunal.
      Muchas gracias por tus palabras, amiga.
      Un beso.

      Eliminar
  10. ¡Enhorabuena! por ese parto que ya nos va dejando ver esa criatura, que se parecerá de guapa a su madre. Después de pasar tantos nervios y una aventura grande tesis. Creo que la criatura ha nacido hermosa y con muchas "P" "P" me imagino que cuando la bautices harás una gran fiesta. Me alegro que todo te haya ido bien. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hermosa sí que ha nacido porque tiene 333 páginas, en DIN A4, eso ya es bastante texto.
      Pero yo ya me he quedado liberada de tanto peso.
      Muchas gracias por asistir desde el principio a este embarazo tan peculiar.
      Un besote, Mamen.

      Eliminar
  11. Ay, Kirke, por dios. Casi me gas hecho sufrir, si no los dolores, sí todo el agobio y los nervios que acompañan al parto. Menos mal que la niña, de la que, como Chelo, me siento un poco tía, ha salido guapa y bien de salud. El apuntará en el registro, con lo que se le dará entidad y derecho a existir, es mero trámite tras el parto.
    Muy amena y divertida tu entrada, pero empiezo a echar de menos tus reseñas.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Espero que mis reseñas ya empiecen a ser más abundantes a partir de ahora. Estas semanas apenas tuve tiempo para leer, estaba tan agotada al final del día que no podía ni concentrarme en una novela. Encima estoy ahora con un super tocho de mil páginas, así que terminar semejante mazacote me está costando mucho.
      Gracias por tu acompañamiento en todo este proceso y sí, la nena es sobrina tuya.
      Besos mil.
      P.D. No te apures por las erratas, a todos nos juegan malas pasadas los malditos teclados táctiles

      Eliminar
  12. hola y felicidades! todo nacimiento es una celebracion, se olvida los dolores y los malos momentos, solo es dicha. y dura para toda la vida!!!!!felicitaciones. saludosbuhos, que ya se consideran tías de la chiquita!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una vez pasado el mal rato todo se da por bueno viendo el resultado.
      Gracias, mi nena está encantada con esas tías del otro lado del charco.
      Un beso grande.

      Eliminar
  13. Buff, me he quedado para el arrastre. Entre la risa y la extenuación porque te aseguro que tu manera de contar el día ha conseguido que recorriera cada uno de esos pasillos. Imagino que tu cara cuando te dijeron que faltaban dos días podría parecerse a la de Willias Fog en LA VUELTA AL MUNDO cuando cayó en la cuenta del cambio horario.
    Me quedo también con el hecho de que parece que el día de presentación parece atraer la enfermedad a las personas que se necesitan. Pero bueno, más en serio, cuando de aquí a unos años, recuerdes estos momentos, ya como doctora porque no dudo en absoluto de que lo vas a conseguir, lo harás con una sonrisa, riéndote de los nervios pasados. Y, quizá, cuando te venga algún meritorio para que le firmes su tesis lo mirarás con ternura, evocando estos días.
    Enhorabuena por el duro trabajo realizado. Un fortiiiiiiiiisimo abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sabes que la memoria es selectiva y tiende a quedarse con los buenos momentos y los malos son recubiertos con una pátina de olvido, por lo que estoy segura de que todos estos agobios dentro de unos años serán un grato recuerdo y rememoraré con cariño esta particular tortura que ahora acabo de vivir.
      Muchas gracias por tus palabras, David.
      Un abrazo.

      Eliminar
  14. Jajajaja cómo me he reido con las aclariones entre corchetes. Vaya Odisea has tenido que pasar, pero por una buena causa. Me alegro mucho de que hayas conseguido tu doctorado, tiene mucho mérito, así que felicidades infinitas!!! Un besazo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, el doctorado lo conseguiré oficialmente cuando el tribunal, ante el que haré la defensa, me dé el acta si me aprueba. Esperemos que todo salga bien, aún queda un poco de camino pero creo que lo peor ya ha pasado.
      Un besote grande para ti, María.

      Eliminar
  15. ¡La verdad es que tu niña se ve preciosa! ¡Mucho éxito en su defensa!

    ¡Pobre, que nervios y angustias has pasado!

    Debes estar ahora fulminado de agotamiento y por otro lado, orgásmicamente relajada!

    Besos
    Pd- El tema es muuuuuuuuuuuuy interesante te diré. Cuando L hayas disputado, Me gustaría que mis contarás tus conclusiones si es posible

    ResponderEliminar

Hada verde:Cursores
Hada verde:Cursores